Fútbol: por el grupo de Boca, Bayern Múnich goleó 10 a 0 a Auckland City

El Mundial de Clubes comenzó con una demostración aplastante de jerarquía. Bayern Múnich, con una actuación que rozó la perfección, goleó 10 a 0 a Auckland City en su estreno en el Grupo C, dejando al descubierto la enorme brecha entre el fútbol europeo de elite y el de otras regiones. En el estadio TQL […]

El Mundial de Clubes comenzó con una demostración aplastante de jerarquía. Bayern Múnich, con una actuación que rozó la perfección, goleó 10 a 0 a Auckland City en su estreno en el Grupo C, dejando al descubierto la enorme brecha entre el fútbol europeo de elite y el de otras regiones. En el estadio TQL de Cincinnati, los bávaros ofrecieron un recital de precisión, intensidad y eficacia que no dejó margen para la sorpresa.

Desde el primer minuto, el equipo conducido por Vincent Kompany impuso condiciones. La presión alta, el ritmo sostenido y la ocupación agresiva de los espacios desbordaron por completo al conjunto neozelandés. Con sus defensores posicionados casi en mitad de cancha, Bayern anuló cualquier intento de salida rival. Jonathan Tah, que jugó como un líbero adelantado, fue el eje de esa presión organizada que asfixió a Auckland.

El gol inaugural fue cuestión de tiempo. A los cuatro minutos, Kingsley Coman ya había obligado a una gran atajada del arquero Tracey. Pero en la jugada siguiente, un córner perfectamente ejecutado por Kimmich terminó con la asistencia de Tah y un cabezazo certero de Coman para el 1 a 0. A partir de ahí, el partido se convirtió en un ejercicio de dominio total del conjunto alemán.

La diferencia se amplió rápidamente. Sacha Boey, incansable por la banda derecha, firmó el segundo tras una jugada hilvanada entre Kimmich y Coman. Luego, un toque de Harry Kane desvió un ataque por izquierda que encontró a Michael Olise listo para marcar el tercero. En un vendaval ofensivo, Coman volvió a aparecer con un remate cruzado para el cuarto, en una jugada colectiva que la defensa oceánica apenas pudo seguir.

Antes del descanso, Bayern sumó dos más: Thomas Müller conectó un centro de Olise para el quinto, y el propio Olise decoró su actuación con un golazo desde media distancia que se coló en el ángulo. En apenas 45 minutos, el equipo alemán había sentenciado el resultado con una superioridad abrumadora.

En el complemento, Bayern no bajó el pie del acelerador, aunque dosificó esfuerzos. Auckland City tuvo una aislada ocasión en los pies de Dylan Manickum, que exigió a Manuel Neuer, pero la respuesta fue inmediata: Serge Gnabry probó desde lejos y volvió a poner a prueba a Tracey, que tuvo una noche agitada pese al marcador.

Con este triunfo, Bayern Múnich no solo sumó sus primeros tres puntos, sino que envió un mensaje contundente: llegó al Mundial de Clubes para ganarlo, y su poderío parece estar varios escalones por encima del resto.